Dayanis Valencia es un ejemplo de valentía, adatación y perseverancia. Con solo 23 años, dejó su vida en Colombia para trasladarse a España, respondiendo a la llamada de su abuela, quien requería compañía y cuidados. Este cambio marcó un antes y un después en su vida, enfrentándola a desafíos que moldearon su carácter y fortalecieron su determinación.
En Colombia, Dayanis había iniciado estudios de Trabajo Social, financiados gracias a las remesas de su abuela desde España. Sin embargo, al mudarse, dejó atrás sus sueños académicos para adaptarse a un nuevo país, donde la pandemia agravó las dificultades. Inicialmente, se dedicó por completo al cuidado de su abuela. “Tuve que tomar la decisión de soltar mi vida para empezar aquí”, recuerda, añadiendo que sentía una profunda nostalgia por la comida, la cultura y los amigos que dejó atrás.
Tras el fallecimiento de su abuela, Dayanis quedó sola y enfrentó una encrucijada: regresar a Colombia o empezar de cero en España. Decidió quedarse, impulsada por el deseo de demostrar que podía salir adelante por sí misma. “Me dije: ¿Y si soy capaz de hacerlo sola, sin la ayuda de mi madre y de mi abuela?”. Su abuela le había enseñado a prepararse el camino cuando ella ya no estuviese, pero eso le daba apenas tiempo y su situación se complicó al carecer de documentación en regla. Con determinación, consiguió vivienda y exploró oportunidades laborales: “Sabía que tenía que trabajar más”, recuerda.
Hane Lore King, la abogada que creyó en el caso de Dayanis
El proceso para regularizar su situación fue otro desafío monumental. Los primeros intentos por obtener la Tarjeta Familiar Comunitaria por familia extensa -al ser nieta- fueron infructuosos debido a propios errores administrativos, y Dayanis llegó a enfrentar el rechazo de abogados que le recomendaron desistir. Fue entonces cuando conoció a Hane Lore King, a quién le designaron su caso en el Turno de Oficio y con apenas 20 días antes de que venciera el plazo para presentar un recurso.
“En el caso de Dayanis, presentamos un Recurso de Reposición. La Administración determinó, entonces, que no cumplía con los requisitos para esta tarjeta pero nosotros entendíamos que si, por lo que interpusimos el Recurso Contencioso Administrativo ante el Juzgado”, recuerda la letrada.
Para complicar más el tema, la obtención de la Tarjeta Familiar se obtiene por el derecho de su abuela y ella –tristemente- fallece mientras abogada y defendida se encontraban a la espera de la celebración del juicio.
Las dudas surgían en torno a si Dayanis podía obtener la Tarjeta Familiar aun faltando su abuela. “Nosotros entendíamos que sí y eso es por lo que luchamos; para que el Tribunal también lo entendiese así, porque la solicitud era anterior a la pérdida de su abuela”, explica.
La guía y determinación de Hane fueron cruciales. Según Dayanis, su abogada “Nunca se rindió”, lo que le infundió fuerzas para cumplir con los requisitos legales y enfrentar la incertidumbre. “Si lo conseguí es porque mi abogada no se rindió nunca. Nunca se dio por vencida. Es cierto que hice todo lo que me pidió, presenté todo, busqué todo y sufrí muchísimo a la espera de esa regularización. Pero lo conseguí, porque a mi lado estaba Hane que sabía lo que había que hacer, y lo hizo”, destaca Dayanis.
Finalmente, en septiembre, obtuvo la confirmación de su residencia. Aunque este logro estuvo marcado por la tristeza de no poder compartirlo con su abuela, quien había fallecido un año antes, y la pérdida de su hermano en Colombia. Pero sí encontró consuelo en su fe y en su capacidad de superación. “Mi abuela se murió sin saber que había conseguido la residencia. Y mi hermano falleció trágicamente en Colombia, en el mes de julio”, dice con dolor.
A pesar de los golpes, Dayanis encuentra consuelo en su fe y en su capacidad de superación. “He sentido que Dios me ha compensado por todo. Echo mucho de menos a mi hermano y a mi abuela”. Hoy, con 26 años, Dayanis trabaja para alcanzar nuevas metas, como estudiar Auxiliar de Enfermería y mantener un equilibrio entre su salud, trabajo y aprendizaje continuo. “Quiero disfrutar de un buen trabajo y seguir aprendiendo de la vida”, afirma.
Dayanis ha aprendido que los sueños son alcanzables con constancia y positivismo. A sus 26 años, sigue trabajando para alcanzar nuevas metas, como estudiar Auxiliar de Enfermería y mantener un equilibrio entre su salud, trabajo y aprendizaje continuo. Su historia resalta la importancia de la educación como herramienta para el progreso personal.
La importancia del correcto asesoramiento
Para HLK Abogados, el caso de Dayanis no solo destaca el papel fundamental de un asesoramiento jurídico efectivo, sino también el impacto humano detrás de cada proceso legal. Gracias a la intervención de Hane Lore King, Dayanis es un testimonio viviente de que, con el apoyo adecuado, incluso los desafíos más complejos pueden superarse. y que, el derecho, es también una herramienta para cambiar vidas.